No puedo dejar de pensar, que camino sin vivir, y respirar se siente tan pesado.
pensar que todo paso el día que deje de soñar; fue como clavarme una daga en el corazón, al renunciar a los sueños. Parece que mate lo único significativo que traje de la niñez.
Mate mi propio impulso de caminar a diario. No se, aunque sea irreal, pero me hacia sentir viva, tenia esperanza del futuro. Pero cuando puse los pies en la tierra fue tan duro.
Lo único que puedo decir es que: soñar es necesario. Vivir sin sueños, sin esperanza de ellos en el futuro, es caminar sin vida, es una total perdida.